Cuando llegó al departamento de Jorge Martínez en la Casa del Teatro el empleado se encontró con una escena dramática: «Estaba al borde del vacío, pero cuando yo subo al noveno ya salió del panorama ese. Tuvimos un forcejeo en una segunda vez«, contó.
Esa «segunda vez» fue cuando ambos hombres estaban adentro del departamento: «Cuando la primera vez lo puedo tratar de tranquilizar y hablar con él, se vuelve a parar y me dice ‘me quiero morir’, y yo lo agarro primero de los brazos y después del hombro, porque Jorge es una persona grandota», recordó.
La situación generó que se llamara a la Policía de la Ciudad y a una médica psiquiátrica que se encargó de derivar al actor al Hospital Rivadavia con dos oficiales como custodia.
Esa no fue la primera interacción entre Jonathan y Jorge Martínez, pero fue la más crucial para salvarle la vida al actor, que está en medio de una depresión, como sugirió la directora de la Casa del Teatro, Linda Peretz.