El precio de la carne, cuyo aumento se esperaba para diciembre, subió entre 10% y 12% durante la última semana, dependiendo del corte. En el mercado de Cañuelas, los valores acumularon otro 10%, aunque no está claro si los frigoríficos podrán trasladar ese incremento al consumidor final, dada la caída en el consumo.
La carne, que tiene un peso del 7% al 13% en el IPC según la región, genera un impacto significativo en el índice. Cada 10% de aumento representa entre 0,7 y 1,3 puntos adicionales en el IPC.
A pesar de esta aceleración, la Fundación Libertad y Progreso sostiene que el proceso de desaceleración inflacionaria no está comprometido. En noviembre, la inflación acumulada en el año fue del 113%, por debajo del 148,2% registrado en el mismo período de 2023. La variación interanual también bajó al 167,3%, marcando la séptima desaceleración consecutiva.